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Millones de mujeres lo saben: parir de manera natural es un proceso que requiere de un esfuerzo casi sobrehumano, aunque al final, matiza la mayoría, "vale la pena".
Para que deje de vivirse con sufrimiento, médicos de la Dirección de Medicina Tradicional e ingenieros biomédicos del Centro Nacional de Excelencia Tecnológica (Cenetec), ambas dependencias de la Secretaría de Salud, diseñaron una mesa obstétrica para que la mujer que va a parir no lo haga acostada, sino sentada, en cuclillas, parada o hincada, posiciones recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para bienestar tanto de la madre como del bebé.
Otra recomendación de la OMS en pro del parto respetado es que el bebé nazca por cesárea sólo cuando es realmente necesario, es decir, sólo en 15 por ciento de los nacimientos totales en un país; en México, 35 por ciento de los nacimientos se realizan por cesárea.
Tras reuniones con parteras de varios estados del país y médicos obstetras, y considerando algunos modelos creados en Argentina y Yugoslavia, la empresa nacional Rochester México fabricó la mesa cuyas características permiten la comodidad de la madre, del médico y la participación del padre u otro familiar de confianza.
"Tratamos de recuperar la idea de que las mujeres sean sujetos y no objetos en el momento del parto, pero también la comodidad del profesional de la salud, para que puedan continuar atendiendo partos de manera muy parecida a como lo hacen ahora y no opongan resistencia al cambio", explica Hernán José García Ramírez, subdirector de Sistemas Complementarios de Atención a la salud y quien ha capacitado a médicos del Hospital Aurelio Valdivieso, en Oaxaca, en la atención del parto vertical con ayuda de esta cama que tiene un costo de alrededor de 14 mil pesos.
"Es totalmente mecánica y puede utilizarse en centros de salud, hospitales comunitarios, generales y de especialidades, de cualquier nivel de atención", asegura Elsa Arellanes, ingeniera biomédica del Cenetec.
Horizontal y vertical
Diversos estudios científicos sobre lo que sucede cuando la madre pare acostada revelan que ella sufre mayor dolor, el bebé tiene más complicaciones respecto a su frecuencia cardiaca, más veces se requirió el uso de fórceps y abrir quirúrgicamente el canal de parto (episiotomía); sin embargo, hubo menos pérdida de sangre.
Entre otras cosas, la posición horizontal también provoca que el peso del producto, la placenta, el líquido amniótico y la sangre que fluye del útero a la placenta se expanda hacia el tórax y reduzca la capacidad de la mujer para respirar adecuadamente, lo que la agota para seguir pujando, situación que no sucede cuando está en posición vertical.
Cuando el bebé nace de manera vertical, tal como se sigue practicando en diversas zonas indígenas bajo la batuta de parteras, el proceso de parto es más rápido y el feto, por la fuerza de gravedad, se puede acomodar mejor para pasar a través de la pelvis. Incluso la mujer requiere hacer menos esfuerzo para respirar y eso baja su ansiedad.
De hecho, se ha medido que, por todos los efectos mecánicos, el canal de parto logra abrirse 2 centímetros más que cuando está acostada, lo que, según Alejandro Almaguer González, director de Medicina Tradicional de la Secretaría de Salud, favorece que haya menos casos en los que los hombros del bebé se atoren.
Considerando pros y contras de ambas posturas, cada vez más comprobados por la comunidad médica, la OMS se ha pronunciado por estimular la práctica del parto humanizado, el cual incluye que la madre decida cómo parir según se sienta más confortable y generalmente eligen las posturas verticales.
En México, las secretarías de Salud estatales ya conocen estas recomendaciones y San Luis Potosí, Colima, Oaxaca, Morelos y Tabasco ya cuentan con programas llevados a la práctica en este sentido, asegura Almaguer González.
Actualmente, la Clínica de la Mujer del Hospital de la Secretaría de la Defensa Nacional cuenta con una cama obstétrica que facilita el parto vertical y se está en pláticas con directivos del Hospital de la Mujer de la Secretaría de Salud y de hospitales del Gobierno de Distrito Federal para que integren a sus modelos de atención la mesa diseñada por Cenetec.
CARACTERISTICAS
La mesa obstétrica para parto humanizado en posición vertical está compuesta por los siguientes elementos.
1. Dos soportes para los pies.
2. Marco para facilitar que la mujer puje, sujetándose de la parte superior o lateral.
3. Un sostén individual para la espalda, que al mismo tiempo se abate convirtiéndose en asiento para su pareja y le brinde sostén físico y emocional.
4. Un sostén trasero que se levanta para dar apoyo a quien acompaña el trabajo de parto, mismo que se ajusta para que la mujer descanse en el postparto.
5. Dos soportes laterales para los pies del acompañante.
6. Un segmento distal que se puede quitar para facilitar la atención del parto y volver a colocar para facilitar el descanso de los pies.
7. Dos segmentos laterales que se desprenden para facilitar la participación del familiar.
8. Una charola en la parte trasera que permite el guardado de los diferentes implementos.
9. Pierneras opcionales para facilitar la revisión de la cavidad uterina.
Vía | Mamá de alta demanda.
Fuente: TabascoHOY.
1 opiniones:
excelente los mexicanos!!
hace años que publique un blog
"parto vertical-en cuclillas fernando Aranovich"
y no he tenido comentarios
Mi barral es muy parecido al vuestro
Homeaaje a M.Odent,H. Sabatino,M-Paciornik,
M.Klauss y J. Kennel
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